La propuesta de Don Bosco era ser Casa, Escuela, Patio y Parroquia:
- Casa que recibe, cuida y sostiene;
- Escuela que educa y brinda herramientas para la vida;
- Patio como un lugar abierto de encuentro y reencuentro continuo;
- Iglesia que acompaña a celebrar y profundizar la experiencia espiritual.
Con un pie en el patio y la comunidad, y el otro en los barrios, la misión es construir un ambiente (social, barrial y familiar) rico en valores humanos, capaz de generar encuentros significativos y profundos.
Y como en toda acción basada en el sistema preventivo, en las propuestas de Don Bosco se fortalece el protagonismo de los jóvenes, entendiendo que en la medida en que puedan reconocerse como sujetos de derecho y personas corresponsables podrán asumir el papel principal en su desarrollo y el de su comunidad. En pocas palabras: ellos y ellas son el centro de las propuestas.
Razón, religión y amorevolezza. Los tres pilares de la obra de Don Bosco unen a propuestas muy diversas entre sí.
En esta presencia salesiana las claves del acompañamiento están inspiradas en el Sistema Preventivo de Don Bosco, método pedagógico que conjugó en el Oratorio como un espacio de promoción social
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